A las 10:50 am hora local, de hoy sábado 10 de Marzo, en la localidad de Smolensk, cerca de Belarus, Rusia, el avión que llevaba al Presidente de Polonia, su esposa, y varios políticos importantes y cabeza de Bancas, se estrelló al aterrizar en la NIEBLA, matando a todos a bordo del mismo.
Este es un evento importante no sólo desde el punto de vista político, especialmente para Polonia y toda la región, pero también desde el punto de vista Astrológico.
Desde hace un tiempo, los astrólogos estamos hablando de la "t-cuadrante" que se hace "casi" exacta al final de Julio 2010. También hemos estado hablando del efecto que podría tener a nivel mundial, además de individual.
Desde que Plutón ha entrado en Capricornio, nos hemos visto en medio de una crisis (oportunidad de cambio, transformación) (Plutón) en las finanzas (Capricornio), caída de gobiernos y cabezas de estado, (Fidel Castro pase de poder a su hermano) entre otros.
En la carta del accidente de hoy, vemos claramente una Gran Cruz entre tres Asteroides, Juno, Pallas y Vesta con Neptuno (la niebla), que además se encuentra viajando con Quirón desde hace un tiempo y que había sido detonada por la Luna, unas horas antes del accidente, posiblemente cuando el vuelo se preparaba para despegar, pasando por los últimos grados de Acuario y contactando Neptuno. A su vez Marte desde Leo, hace un aspecto de 150º a Plutón, que a su vez es en la cuadratura a Urano, cada vez más próxima que incluye a Saturno que vuelve a entrar en Virgo, oponiendo a su vez casi exactamente a Urano.
En las últimas dos semanas hemos visto dos terremotos más, en Mexico e Indochina. Sin afán de predecir, es posible que Fidel Castro termine su recorrido por esta vida este año.
En este accidente de hoy, han muerto, no sólo el presidente de Polonia, sino otros políticos importantes.
Todo parece indicar que los cambios políticos, y de nuestro sistema finaciero, como también de los sistemas educativos vigentes son inevitables, y que nosotros podemos atrasarlos, pero no posponerlos por mucho tiempo.
No debemos leer esta increíble T-Cuadrante entre Plutón-Urano-Saturno, como algo negativo, sino como un vortex que nos lleva, finalmente a otra dimensión, donde la toma de conciencia colectiva es inevitable e inminente.
